- El libro de Eduardo Ranz El dilema de compras para el CEO presentado en Madrid llama a revolucionar la función de compras
- Nace el procurement líquido, la primera teoría de gestión que sitúa a los directores de compras como figuras ubicuas en primera línea directiva
- La obra está avalada por los líderes mundiales en compras, KLB, así como por la tecnológica Avanti Lean y la central de compras para startups Startify
El libro El dilema de compras para el CEO, cuyo autor, Eduardo Ranz, se ha presentado en el Café Comercial de Madrid y propone la reestructuración y empoderamiento de la función de compras en las empresas en un nuevo concepto que llama procurement líquido.
El procurement líquido nace de la exigencia a los directores de compras, responsables de los 1.800.000 millones de euros en bienes, servicios e infraestructuras comprados al año en España, poco más del triple del coste salarial nacional y 1,5 veces el PIB, de ser transversales, tecnológicos y capacitados para una constante adaptación al cambio.
Según Ranz, ya no es suficiente con tener un buen nivel de eficiencia operativa en los procesos tácticos o una excelente metodología en los procesos de contratación, sino que la función debe ser ubicua y situarse en la originación de todos los proyectos de la empresa, pues ni siquiera los programas de desarrollo de proveedores y gestión de riesgos más estratégicos estarán a salvo de los avances de la robótica o la inteligencia artificial.
“Las compras han de ser tan liquidas como el mundo en el que vivimos, por eso la consecuencia del trabajo en procurement ha de ser la eficiencia, sí, pero nuestra máxima responsabilidad es la generación de alianzas estratégicas, endógenas y exógenas, adoptando una posición más cómo aliado que cómo héroe”, destaca Ranz.
Para lograr resolver el dilema de compras que se le plantea a los CEOs de las empresas y que da título al libro, el autor recurre al procurement sustanciador, ya que el valor de compras se mide y se comparte con el resto de la organización por conversión de valor, no solo por ahorros. Y se concreta con la aplicación del embudo de compras; el procurement cognitivo, que requiere adoptar una visión transformacional y de negocio con el apoyo de la tecnología; el procurement de innovación, de cara a que los CPOs la reformulen con pensamiento crítico y creativo; el procurement holístico, que llama a todos los directivos y empleados a implicarse en las compras y ventas, acabando con los indicadores departamentales y asumiendo un liderazgo inspiracional; el procurement ubicuo, abogando por una visión de economía circular en base a alianzas internas y externas de negociación conjunta, omnidireccional, entre compras, proveedores y departamentos implicados, y el procurement de contexto, aprovechando todas las oportunidades para crear experiencias relevantes de manera transversal y transparente que se explica con el método de confianza distribuida.
El autor, que congregó a medio centenar de directores de compras en la presentación, estuvo acompañado por los CEOs de KL2B, Manuel Balastegui, en representación del lobby líder mundial en procurement, KLB, del proveedor de la plataforma de compras para empresas de Avanti Lean, Alejandro Hernanz, y de la central de compras para startups Startify, Francisco Álvarez.
Hernanz incidió en que la función de compras debe de dejar de ser una mera función operativa para convertirse en un arma de competitividad y convertirse en un departamento realmente estratégico para la empresa.
“Esto pasa por ganar importancia desde la colaboración humilde con cada uno de los restantes departamentos, de modo que seamos una fuente de atracción a la innovación para nuestra Compañía, garantizando proveedores que nos aporten procesos más eficientes y dejar de mirar únicamente al ahorro contable”, asegura.
Hernanz añade que “garantizar trabajar con los mejores proveedores, con mayor calidad de servicio, que nos mejoren nuestros procesos necesarios para nuestra actividad, y aun precio justo de modo que mantengamos con ellos una relación más de partner que de proveedor-comprador”.
Para esto, continúa Hernanz, “es necesario dotar a los departamentos de compras de la tecnología necesaria de modo que puedan ganar en eficiencia, automatizando las tareas más administrativas y de escaso valor, y convertirse en una fuente de mejora de la competitividad en todas las áreas de la empresa y en un socio fundamental del CEO”.
Finalmente, Francisco Álvarez compartió la reflexión de que el nuevo rol de procurement líquido ya está activo en el ecosistema startup, donde el CEO es, a su vez, el director de compras y debe resolver los dilemas de ambos, y que el libro supera la tradicional disquisición entre eficacia y eficiencia de Michael Porter (“eficacia es hacer las cosas bien, eficiencia es hacer bien las cosas”) al resolver el dilema de ambos esfuerzos en la nueva modernidad líquida e insegura de Baumann.